Friday, May 04, 2007

Las técnicas de persuasión de Satanás, cuando nos envía a llenar nuestros morrales, son: "Comed, bebed y divertíos,. . . porque mañana moriremos" (2 Nefi 28:7). Su invitación puede parecer atractiva y convincente. Nefi tilda estas técnicas de "pacificadoras" y "lisonjeras" cuando el adversario dice que "todo va bien" (2 Nefi 28:21­22). Entre otras cosas, Satanás desea que en nuestros morrales metamos todas las formas de inmoralidad, incluyendo el ver pornografía, o un lenguaje, vestimenta y comportamiento inapropiados. Y es que tales maldades suelen acarrear angustia emocional, pérdida de espiritualidad y de respeto propio, pérdida de la oportunidad de servir una misión o casarse en el templo, y a veces ocasionar incluso embarazos no deseados. Satanás desea que metamos drogas, alcohol y tabaco en nuestros morrales.
Satanás nos dirá que esas cosas están bien y que "todos lo hacen". Nos dirá que nos darán fama y aceptación. Sus mentiras pueden ser muy atractivas, en especial en esa etapa crítica de la vida en que los jóvenes desean ser populares y aceptados.
· Todo el mundo lo hace".
· "Nadie lo sabrá".
· "No le hace daño a nadie".
· "Una vez no hace mal alguno".
· "¿Y qué?"
· "Uno se puede arrepentir luego y todavía ir a la misión y casarse en el templo".
· "Cristo expió por nuestros pecados; Él me perdonará".
Cuando las personas nos dan este tipo de justificaciones abiertamente, o cuando nuestro temperamento nos las susurra, sabemos que se nos está advirtiendo. No les presten atención. No experimenten con ellas. Simplemente, no lo hagan.
Dios, nuestro Padre amoroso, la fuente de toda verdad, nos ha advertido del engaño de Satanás. Escuchen lo que el Señor ha dicho por medio de Sus profetas:
· Pablo enseñó a los santos de Corinto: "¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros? Si alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a él; porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es" (1 Corintios 3:16­17).
· Jacob amonestó a los nefitas de la antigüedad diciendo: "¡Pero ay, ay de vosotros que no sois puros de corazón, que hoy os halláis inmundos ante Dios!" (Jacob 3:3).
· Alma recordó a su hijo rebelde, Coriantón, en cuanto a la impureza sexual: "¿No sabes tú, hijo mío, que estas cosas son una abominación a los ojos del Señor?" (Alma 39:5). Y luego añadió: "La maldad nunca fue felicidad" (Alma 41:10).
A no ser que pensemos que estas advertencias eran exclusivas para la época de la Biblia, escuchen lo que nuestro profeta actual, el presidente Gordon B. Hinckley, ha dicho:
A pesar de lo que ahora se conoce como la 'nueva moralidad', a pesar de los muy debatidos cambios en las normas morales, no existe ningún substituto adecuado para la virtud. Las normas de Dios serán desafiadas por todo el mundo; sin embargo, Dios no ha revocado Sus mandamientos" ("Lo que nos enseñan los profetas en cuanto a la castidad y fidelidad", Liahona, octubre de 1999, págs. 26­27; cursiva agregada).
Así que nos preguntamos: "¿A quién vamos a creer en nuestra búsqueda de la felicidad y el bienestar?". ¿Será a Satanás, el autor de todas las mentiras y engaños, cuyo único objetivo es nuestra destrucción? ¿O vamos a creer a un amoroso Padre Celestial, que es la fuente de toda verdad y felicidad, cuyo exclusivo propósito es recompensarnos con Su dicha y amor eternos?
ALMA 41:10

EXTRACTO DE CONFERENCIA GENERAL OCTUBRE 2000

El morral de caza de Satanás
Obispo Richard C. Edgley Primer Consejero del Obispado Presidente

0 Comments:

Post a Comment

Subscribe to Post Comments [Atom]

<< Home